Texto publicado en https://www.facebook.com/Consciousparentingnow, traducción realizada por Luis Isaza.
Cuando era adolescente, mi hija mayor de manera frecuente gritaba, beligerante e irrespetuosa. Esto era incomodo para mi. mi reaccion era ignorarla, gritar y usar mi autoridad de padre, para hacerle saber a Hannah que no podía hablarme de esa manera.
Pero me di cuenta de algo: Hannah estaba intentando ser asertiva. Ella estaba aprendiendo y practicando un habilidad importante de vida. La única manera saludable de expresar su frustración y enfado era verbalizandolo (que no tenia problema en hacerlo) de una manera sensible y controlada (que aún no sabia como hacer).
Con este hallazgo, modifique mi manera de manejarlo. Le di a Hannah libertad. Estuve calmada. Me recordé que sus gritos no estaban comprometiendo mi autoridad de padre. Ella solo tenia sentimientos fuertes y los estaba expresando de la mejor manera que sabe. Mostré empatia a sus pensamientos y sentimientos para que supiera que la escuchaba y entendía. Hice mi mejor esfuerzo para hablarle a Hannah y como quería que Hannah aprendiera a hablarme.
Con esta manera de manejarlo, ella se calmaba y las cosas así no empeoraban. Ahora yo podía felicitarla por expresar sus pensamientos y fuertes sentimientos de una manera mas controlada. Hannah estaba encaminada a manejar su enfado y volverse, no solo una persona asertiva, sino también una persona que podria practicar la asertividad saludable en sus relaciones con otros.